……con los brazos abiertos!

Prometo que nunca me imaginé escribiendo esto, no porque no lo hubiera pensado, sino porque por edad me tocaba a mí, que para eso soy la mayor. 

Hace una semana y tres días que conocía una noticia que me hace la mujer más feliz del mundo; no, no me ha tocado el Euromillón, tampoco la Primitiva, ni he firmado el contrato de mi vida, pero simplemente hay cosas que ponen tu mundo del revés y hacen que todo lo demás sean memeces y pasen a ocupar un segundo, un tercer y hasta un cuarto o quinto lugar.

Hace una semana y tres días que mi hermano me dio la mejor noticia del año 2015, al menos hasta el momento.

–No sé si es bueno o malo lo que te voy a decir pero espero que estés sentada. Y sí, en ese preciso momento, estaba sentada, eran las 11 de la mañana de un lunes y terminaba una bufanda para mi amiga I. –Pero creo que vas a ser tita, me dijo.

Y al conocer la buena nueva no volví a estar sentada en todo el día, al menos con tranquilidad.

Yo tita, tita carnal, que política ya lo soy hasta en tres ocasiones y cada vez quiero más a esos tres pequeños que dicen mi nombre dibujándome una sonrisa de por vida en la cara, que me llaman (al menos los dos mayores) para que juegue con ellos, para que veamos juntos los dibujos, para que les ayude a pintar, para darme gusanitos, para repasar los números,…..para lo que sea.

También tengo que reconocer que hace 10 años que me siento un poco tita, aunque de otra manera, hace ese tiempo que nacieron Mario e Irene, los hijos de mi prima hermana B. que nos dio la oportunidad a mí y a mi hermano A. de ser padrinos de Irene y desde ese momento me he sentido tita suya, aunque ellos me llamen prima.

Pero a lo que íbamos, la noticia, el notición, las palabras que cambiarían mi vida, las de mis padres que cumplirán por fin su sueño de ser abuelos, pero sobre todo, la de mi hermano y mi cuñada que después de casi una década juntos ampliarán la familia, con un retoño que les sacará el sol de la cabeza, que puede que les de alguna que otra mala noche, que hará que todo lo demás ya no tenga tanta importancia, que verán en el pequeño o la pequeña, porque aún es pronto para conocer el sexo, el futuro, la necesidad de luchar, verán en su cara el valor para seguir adelante, para que todo le sea propicio.

Viviré por primera vez esta emoción, y sé que desordenará, desordenarás mi vida, como dice Ismael Serrano en su canción ‘Regalo para un primer cumpleaños’, celebraré la llegada de este bebé, celebraré tu llegada pequeño o pequeña y estoy segura, de eso no tengo duda, de que tendrás los mejores padres del mundo.

Y si te aburres de ellos, ya sabes que la tita Ana te recibirá con los brazos abiertos!!!!